sábado, 5 de marzo de 2011

Dejarse los dientes

Es el tercer aniversario de mi pérdida de dientes.
La historia comienza una noche en la cabalgata de carnaval de Las Palmas de Gran Canaria. Año de inspiración griega. Y ahi estaba yo, dándolo todo en medio de la fiesta con unas sandalias romanas construidas por mi que se habian roto y un suelo resbaladizo, resultado: ostión de campeonato. ¿Como se puede caer una persona de morros, romperse las dos palas y no hacerse ninguna herida en barbilla y nariz? imposible, creanme no, clavé los dientes contra el suelo literalmente. Fui con mis amigos todos se partieron el culo de mi y seguimos bailando, al rato me entró el raciocinio y me fui a casa.

La mañana siguiente me desperté y se me vino a la cabeza, no tengo dientes, y pense no no, lo he soñado! como no voy a tener dientes?????? Fui al espejo y la imagen era horrorosa: pelo afro (nos lo habiamos cardado) color dorado, ojos cual oso panda (es decir un manchurron negro), un vestido de griega a medio colocar y como era el Pozi. Mis palas habian desaparecido!!!!!!
Fui corriendo al salón donde mis amigos se habian alojado para pasar la noche y les dije, no tengo dientes!!!!!!!!!!!!!!!!! y se echaron a reir, de mi imagen tan patética, sólo me pude reir con ellos! Asombrosamente lo llevé bastante bien.

3 comentarios:

  1. Que tragedia!! :O que raro debe ser despertarse y encontrarse así! me recordó a la película The Hangover.

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  2. No conozco esa peli pero tendré que verla.
    Fue un poco tragedia pero habia que tomarselo con humor (mi madre que pago la factura del dentista no tanto)
    ahora siempre sera una gran historia, jajajajajjajajaj

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